Solo unos pocos afortunados pueden comprar un coche nuevo tal y como esta la cosa hoy en día. A ver no es que estemos tan mal como para no poder hacer muchas cosas, pero si es cierto que nos está costando mucho salir de la crisis, este remonte en la economía que dicen los políticos que estamos viviendo no se termina de ver clara. No estamos ni a la mitad de cómo estábamos antes de la dichosa crisis. La verdad es que estamos más predispuestos a que las cosas vayan de mal a peor a que se mejoren, y no es porque seamos supersticiosos o gafes, es que llevamos ya varios intentos en los que forzamos las cosas para que vayan mejor y no lo hemos conseguido aun.
Cuando no podemos comprar coches nuevos, recurrimos a los de segunda mano, en algunos casos estos coches dan problemas, ya sea por que no están bien revisados o arreglados, o bien porque necesitan algunos arreglos más, algunos de ellos solo necesitan un cambio en el motor, por eso se buscan alternativas como en http://www.motoresdesegundamano.es/ y problema resuelto. Si bien el motor es la parte más cara el vehículo, cuando se realiza un cambio de motor se dota al coche de unos buenos años más de vida, lo cual está muy bien si tu propósito es comprar un coche que te dure toda la vida aunque no sea sacado del concesionario.
Un coche nuevo está muy bien si puedes permitírtelo, pero también es cierto que un coche de segunda mano que no de problemas, es tan efectivo como uno nuevo y por supuesto más barato. Lo importante de comprar un coche de segunda mano es saber donde se compra, siempre hay que hacerlo en lugares donde te den garantías de compra y por supuesto donde sea más económico.
Comprar un coche de segunda mano es una lotería, con suerte te irá bien y encontraras un buen coche que dure varios años, son coches que no necesitan grandes inversiones, suelen salir bien revisados de los desguaces o de los talleres en los que se comprar y como norma general en los cuatro o cinco años siguientes funcionan como la seda, por supuesto se les deben de realizar las revisiones y los controles para que no se deteriore más rápido de lo necesario. En definitiva, nuevo o de segunda mano, un coche es un coche.